Wismar Marval/
Desde el pasado sábado 14 de agosto se encuentran maquinarias sacando las vigas de hierro que servían de rieles del ferrocarril en la zona de Bartolomé Salom de Puerto Cabello.
Estas rieles están enterradas, serían enviadas a una empresa fundidora y con ellas a través del fundido producir cabillas y otras herramientas necesarias para el sector construcción en el país.Según se pudo conocer por versiones recabadas en el sitio de trabajo por personas presentes allí.
Serían cientos de metros, de este material que tiene años enterrados en el sector Bartolomé Salom de Puerto Cabello, que podrían convertirse en kilómetros si desentierran las vigas que están semienterradas desde Puerto Cabello hasta Barquisimeto.(En las cercanías de los andenes de las estaciones existiría una gran cantidad de vigas deterioradas y que podrían ser fundidas).
El movimiento de tierra también dejará los espacios de las áreas verdes en condiciones para que puedan disfrutar los vecinos y usuarios que transitan en esta vía.
El Instituto de Ferrocarriles del Estado (IFE) estaría al frente de estos trabajos, y se espera la confirmación de la información oficial en las próximas horas.
Las primeras versiones de vecinos del sector expresaban que se estaban llevando el material estratégico para ser comercializado como chatarra, pero luego se conoció que todo estaba bajo órdenes del Instituto de Ferrocarril del Estado.
“Ojalá se les ocurra construir un Parque Ferroviario en este sector, donde puedan colocar vagones y locomotoras viejas, con la historia del Ferrocarril de Puerto Cabello así recuperan estos espacios y disfrutamos todos así lo expresó Julio Vásquez, habitante del sector.
Por su parte Gregorio Lugo expresó que de esta chatarra que van a fundir al menos dejen algo para la comunidad, “cabillas o láminas de zinc para reparar casas de esta zona, escuela y cambien los postes de alumbrado público que están a punto de caerse en Bartolomé Salom, aquí tenemos años con ese material estratégico enterrado en nuestras narices y ahora es la oportunidad de que al menos podamos beneficiarnos en algo, aunque sea una cancha deportiva para nuestros hijos” enfatizó Gregorio Lugo.