Wismar Marval/
El pasado mes de mayo un total de 13 tripulantes dieron positivo por Covid-19 en dos barcos que la Autoridad Portuaria de Valencia (APV) confinó en sus instalaciones en las zonas de atraque en “Muelle de Cruceros 2” y “Muelle de Cruceros 3”, -situados ambos en el interior de la Ampliación Norte del Puerto de Valencia en España. Según un trabajo periodístico publicado en diario La Vanguardia.
Los tripulantes forman parte de dos buques portacontenedores procedentes de Algeciras y de Barcelona con 6 y 4 tripulantes, respectivamente, con síntomas de la enfermedad provocada por el virus del COVID-19. Se trata del “Maersk UTAH”, de la compañía Maersk; y del “Skiathos I”, de la naviera Marfret.
El ofrecimiento realizado por el puerto de atracar ambos buques en aguas seguras interiores y apartadas de la actividad comercial ha sido aceptado por Sanidad Exterior y por las propias navieras para poder atender con mayor facilidad a las personas infectadas.
Según un trabajo periodístico publicado en diario La Vanguardia, dice que se garantizó un mejor cumplimiento de la cuarentena requerida en estos casos y el cumplimiento de los protocolos y garantías sanitarias cuando surgen síntomas del COVID-19 en las tripulaciones de las embarcaciones dedicadas al transporte marítimo de mercancías.
Los dos barcos llegaron al Puerto de València el día 1 de mayo. Ambos comunicaron que en sus tripulaciones había marineros con síntomas del COVID-19 (seis en el caso “Maersk Utah” y cuatro en el “Skiathos I”).
Allí Sanidad Exterior, Autoridad Portuaria de Valencia y los capitanes de los barcos actuaron según las instrucciones de aislamiento de los contactos estrechos que han mantenido los tripulantes en sus respectivas embarcaciones.
Explica la nota, que ningún marinero bajó a tierra para ser atendido en centros hospitalarios valencianos.
Según un artículo encontrado en Internet sobre el Control Sanitario por enfermos a bordo el Artículo 9º dice: Controlará el trabajo realizado por el Médico o Practicante o quien cumpla dichas funciones, en todo lo que concierna a la salud de la tripulación, pasajeros y a la administración de tratamientos médicos, así como la redacción de los partes médicos necesarios.
No existiendo médico a bordo, tomará las medidas que estime convenientes en salvaguarda de la atención de las personas enfermas a bordo y en tales casos podrá trasbordar al enfermo a un buque próximo que cuente con médico o desviar el buque y recalar en el puerto más próximo.
En tales casos, deberá anotar en su Diario de Navegación, la desviación de su ruta, tiempo empleado, practicajes, gastos de puerto y toda clase de gasto incurrido, con el fin de que su armador pueda recuperar del seguro tales gastos.
Los gastos incurrido en la atención de un enfermo en puerto deberán ser recogidos por el Agente del buque y el Capitán deberá advertir a aquél cual es el tipo de seguro que cubre a su tripulación, a los fines pertinentes.
Si fallece algún tripulante
El Artículo 10 explica lo siguiente: Si falleciera un miembro de la tripulación o un pasajero el Capitán procederá de acuerdo a lo dispuesto en el Artículo 1132 del Código de Comercio y asentará el hecho en el Diario de Navegación, firmando con dos testigos, indicando lugar de defunción, fecha, hora civil local, nombres y apellidos, edad, empleo, residencia en tierra, lugar de nacimiento, causa probable de la defunción y testigos presentes con todos sus datos personales. Hará además un inventario de todos los efectos personales del fallecido y los hará guardar en lugar seguro, para entregarlos a la Autoridad Marítima al regresar al puerto matrículo.
“ARTICULO 1132 DEL CODIGO DE COMERCIO.
Si durante la navegación falleciese algún pasajero o individuo de la tripulación, pondrá el Capitán en buena guarda todos los papeles pertenecientes del difunto, formando un inventario exacto con asistencia de los Oficiales del buque y dos testigos, prefiriendo a este fin a los pasajeros si los hubiere.
Luego que llegare al puerto de su salida hará entrega del inventario y bienes a las autoridades competentes.”
Igualemnte otro trabajo colgado en internet dice que : La tripulación de un barco, corre mayor riesgo de exposición al COVID-19. Al igual que muchos otros virus, el virus que causa el COVID-19 (SARS-CoV-2) parece propagarse con mayor facilidad entre personas que se encuentran en espacios reducidos a bordo de embarcaciones.
Coronavirus: ¿son realmente las embarcaciones hervideros flotantes de virus y bacterias?
Según un trabajo de la BBC News Mundo de fecha 19 febrero 2020 El crucero Diamond Princess es el sitio fuera de China donde hay más casos confirmados de coronavirus.
Tras dos semanas de espera, los más de 3.000 pasajeros y tripulación varados en un crucero en cuarentena en Japón por el coronavirus comenzaron a desembarcar.
El Diamond Princess estaba retenido en el puerto de Yokohama desde el 3 de febrero, después de que se confirmara que una de las personas a bordo —que se bajó en Hong Kong— había dado positivo en una prueba para ver si tenía o no el virus.
Las autoridades japonesas confirmaron este 19 de febrero 79 nuevos casos en el barco, lo cual aumenta el total a 621.
Aún así, no es el único crucero donde se ha registrado la enfermedad: también ha habido infecciones en el MS Westerdam que atracó en Camboya, y otros barcos —de los que hasta el 19 de febrero no hay casos confirmados— fueron puestos en cuarentena.
¿Pero cuánto se ajusta realmente esta descripción a la realidad?
En los barcos, hay un mayor riesgo de enfermedades respiratorias y gastrointestinales, señala Sanjaya Senanayake, especialista en enfermedades infecciosas de la Universidad Nacional de Australia.
“Todos tienen diferentes niveles de inmunidad y eso genera un campo fértil para un brote de infección”.
Con el coronavirus, que se cree que se propaga por las gotas de las secreciones respiratorias —como el moco o la saliva— la gente puede contagiarse sin estar en contacto directo con la persona infectada.
“Si alguien estornuda por ejemplo sobre una mesa, y alguien toca inmediatamente la mesa, eso puede dar lugar a una infección”, afirma Senanayake.
Otro caso más
Otro caso sucedió el 13 de mayo, cuando el barco American Dynasty, especializado en la pesca de lenguados de aleta amarilla, zarpó de Seattle (EE UU) con 122 tripulantes a bordo supuestamente saludables. Poco más de dos semanas después, el buque tuvo que regresar a puerto, tras enfermar gravemente uno de los trabajadores hasta requerir hospitalización. El 85% de la tripulación estaba infectada por el coronavirus.
Prácticamente todos los tripulantes —120 de 122— se habían hecho análisis uno o dos días antes de zarpar, sin rastro del virus. Tres de ellos presentaban anticuerpos neutralizantes, las proteínas producidas por el cuerpo humano para defenderse del nuevo coronavirus, indicio de haber superado la infección en el pasado. Los 122 miembros volvieron a hacerse análisis al llegar a puerto. “Ninguna de las tres personas que tenían anticuerpos neutralizantes antes de zarpar se infectó durante el brote”, subraya un grupo de investigadores de la Universidad de Washington, que ha publicado un estudio preliminar sobre el caso del American Dynasty. “Por el contrario, de las otras 117 personas seronegativas [sin anticuerpos detectables], 103 se infectaron”, recalcaron.
American Seafoods, la empresa propietaria del barco pesquero dijo: “Pese a nuestros esfuerzos, […] el virus nos encontró”.
¿Puertos de Venezuela estarían preparados?
Quienes residen en zonas costeras en Venezuela y donde exista un gran puerto para exportación e importación, están actualmente en expectativa por saber si estamos preparados para una eventualidad de presentarse un contagio masivo en embarcaciones que esten anclados en la rada del puerto o la bahía.
Es un tema complejo, muchos dicen que no existen pruebas sobre los rumores que circularían sobre una posible causa de muertes de tripulantes a causa del Coronavirus en embarcaciones cercanas a las costas venezolanas.
“Las autoridades locales de cada puerto tienen el deber de informar y hacer del conocimiento público lo relacionado a posibles casos de contagios y fallecimientos en embarcaciones por el mortal virus, así como lo hacen en otros países.” Dijo una fuente ligada a la Capitanía de Puertos local.
“Tal vez para no alarmar a una población, se esconderían informaciones sobre casos de Covid en embarcaciones, pero esto podría ser un arma de doble filo, ya que se permitiría la entrada de especulaciones y noticias falsas (Fake News ) en redes sociales lo cual generaría preocupación en los habitantes de una zona costera.” Aseguró el informante.
Pero para los entendidos del tema en cuestión, se desconoce cuáles serían los medios o protocolos que se pondrán en ejecución para que los habitantes de una zona portuaria puedan saber a ciencia cierta o tener la certeza que detrás de los rumores podría existir una realidad. Hasta la fecha junio 2021, las autoridades en Venezuela no han ofrecido alguna información oficial sobre algún caso de muertes en embarcaciones situadas en las costas por Covid-19.
Fuentes: La Vanguardia / BBC News Mundo