César Burguera /
La demoledora frustración. En la pasada entrega hacíamos referencia de la designación de la periodista Claudia Pinto como nueva directora del matutino Notitarde, exaltábamos sus características de talento, su ímpetu e Indeclinable entrega como necesarias herramientas para el rescate y reivindicación de esta importante casa editorial. Destacamos que su fuerza y juventud contrastaba con aquellos que en el pasado reciente, tal vez acechados por esos despiadados fantasmas que les anuncian su pronta condena tras grises barrotes, sumieron al Notitarde en el más oprobioso olvido. Pero ante esta designación surgieron el visceral odio, el irreversible resentimiento y la incurable frustración. Observamos cómo algunos periodistas de la región, se permitían la licencia de cuestionar la capacidad y talento de la nueva directora del Notitarde. De esa forma surgía una longeva comunicadora social para hacer absurdas comparaciones y proclamar que la juventud no tiene cabida en la función de dirigir los destinos del matutino. Tal vez su frágil memoria haya desechado sus propios pasos cuando recién egresada, hace varias décadas, cumplió funciones protagónicas en un importante grupo editorial en la ciudad de Caracas. “Juventud divino tesoro” atormenta y repite insistentemente la vetusta periodista. Igualmente surgía desde su propia oscuridad aquel otrora director para hacer confusas apologías que tan solo existen en su senil mente u espíritu confundidos por el diario trajinar y efecto de varias copas de vino. Pero el resentimiento llegó a tomar forma y figura cuando un comunicador social, el mismo que ha convertido a su fallido blog en un hábil instrumento para ofrecerse, en una suerte de lucrativa prostitución, al mejor postor y plasmar publicaciones a cambio de mensuales dádivas. Pero el corrompido periodista no escogió el alegato de la juventud para cuestionar a la nueva directora del Notitarde, sino que llegó a señalar que ninguna mujer podría ejercer funciones de dirección en ningún medio de comunicación y allí encontrarnos de frente con un comentario misógino y pervertido, propio de una mente realmente atormentada. Por todo ello es que escriben desde lo visceral, se sienten desplazados y es que esta designación en el icónico matutino sencillamente afectó sus propios intereses o de aquellos que se lucraban, desde las oficinas de lujosos hoteles y estación de radio, de la progresiva devastación y aniquilamiento del Notitarde.
El etílico festín. En días pasados y por las redes sociales, aparecía la sorpresiva información que daba fiel constancia de la realización de un verdadero festín, un desenfrenado bacanal aderezado de estridente música e ilimitadas bebidas alcohólicas. En el video se puede observar a un importante número de personas en un espacio de la estrecha habitación. El festín al parecer continuaba acompasando el tránsito de la divertida noche y sucumbiendo ante el ineludible efecto etílico, el numeroso grupo trataba, de manera torpe, ensayar sofisticados pasos de baile. Lo significativo es que este revelador video fue expuesto y ampliamente difundido por el presidente de la Asociación de Columnistas del Estado Carabobo, Rafael García Marvez, quien alarmado por la inoportuna ocurrencia juvenil y en épocas de dramática pandemia, daba instrucciones a cada uno de los miembros de la asociación para que procedieran a divulgar y retransmitir el ocurrente video. Rafael García Marvez sin ningún rasgo o señal de solidaridad automática, asumió la responsabilidad de presentar para conocimiento del colectivo el video donde se puede divisar, en funciones protagónicas, al dirigente de nuestra UC, Marlon Díaz quien contravenía las estrictas normas de cuarentena radical implementadas en el país para evitar la cadena de contagio de un demoledor virus que ha traído una trágica estela de dolor, sufrimiento y luto. Es el mismo Marlon Díaz, a la sazón organizador y promotor del desdichado festín, quien en días anteriores al desenfrenado bacanal, de manera cínica hiciese duros cuestionamientos al esfuerzo y sacrificio de todos los entes gubernamentales para hacerle frente a este azote del siglo XXI que se presenta con la triste y sombría denominación de Covid-19.
El histórico hurto. La pasada semana surgía una misiva suscrita por algunos honorables miembros de la junta directiva de la Academia de Historia del estado Carabobo y que fuese enviada al gobernador Rafael Lacava. En la comunicación se manifiesta la preocupación por el mal estado de los museos, monumentos de la región y formalmente se solicita la ayuda de la administración gubernamental. Estamos en la plena convicción de que este requerimiento será atendido de manera oportuna por Rafael Lacava, quien ha exhibido su plena vocación por lograr la transformación de este estado. Sin embargo la junta directiva en su válida preocupación, debe acometer, en primer lugar, a solicitar una cristalina rendición de cuentas por parte de Carlos Cruz en su ejercicio como presidente de esa íntegra institución. Habrá que recordar que en el mes de septiembre del 2016 se produjo la firma de un convenio institucional entre el Gobierno de Carabobo y la Academia de Historia, quien en aquella oportunidad fue solitariamente representada por Carlos Cruz. Una vez firmado el aguardado convenio, le correspondió al presidente de la histórica academia explicar el alcance de esta importante alianza y allí llegaba a asegurar que “Estos recursos, producto del convenio, serán invertidos como primer objetivo en el proceso de digitalización de los archivos históricos, ya la academia está realizando ese arduo trabajo”, finalizando su intervención con la aseveración “Además de la firma de este importante convenio, hemos solicitado al ejecutivo regional y se han comprometido en crear una partida presupuestaria especial para los museos de Carabobo que les permita realizar trabajos de mantenimiento, reparación y restauración, será la primera vez que los museos de Carabobo tendrán partida propia para esos trabajos”. Ante lo descrito surge indefectiblemente el silencio y la duda, una perturbadora interrogante nos agobia. ¿Cuál fue el destino final de esa importante inversión gubernamental? Carabobo y Valencia aguardan la respuesta. No hay espacio para la impunidad. Y esa es la verdad.
César Burguera @CESARBURGUERA