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La negativa por parte del régimen de permitir el ingreso al país de las vacunas AstraZeneca mediante el mecanismo Covax de la Organización Mundial de la Salud (OMS), las cuales servirían para inmunizar al personal sanitario y a quienes pertenecen a grupos de riesgo, condena a los venezolanos a continuar sufriendo las graves consecuencias del alarmante incremento del número de contagios reportados en esta segunda ola, según nota de prensa enviada a esta redacción.
Desde Voluntad Popular Carabobo exigimos que se agilice la importación de estas vacunas, cuyos ensayos científicos determinaron que es segura y eficaz.
La decisión de negar su ingreso es netamente política y forma parte del ataque sistemático contra la población. Cada minuto que pasa sin un plan de vacunación masivo representa la muerte de más integrantes de la primera línea de lucha contra la COVID-19, así como de ciudadanos vulnerables.
La semana pasada fue, hasta ahora, la más difícil de la pandemia en Carabobo. El fallecimiento de tres médicos y un odontólogo en menos de 48 horas engrosó la estadística de mortalidad a causa del virus. Al menos 57 profesionales sanitarios han muerto hasta la fecha en el estado de acuerdo a los registros que llevan los gremios del sector salud y que el régimen se niega a contabilizar.
Son 34 médicos, 19 odontólogos y cuatro enfermeras los que han perdido la vida en esta guerra contra la COVID-19 en la entidad carabobeña. Ante esto, nuestra organización política envía especiales condolencias a todos los familiares, allegados y gremios por tan irreparable y dolorosas pérdidas.
Rechazamos la forma en la que el régimen ha venido abordando esta crisis sanitaria. Simplemente volteó su mirada y decidió no atender a nuestra gente, violentando los principios básicos de la ciencia. El no aceptar las vacunas disponibles a través de Covax, gracias a las gestiones del gobierno legítimo y la verdadera Asamblea Nacional, es un ejemplo de esto.
Además, condenamos que se hayan negado a cumplir con los principios de priorizar a los grupos vulnerables, tal como lo establecen los protocolos internacionales emitidos por la OMS y otras organizaciones. Llegaron 700 mil dosis y lo que hicieron fue desviarlas para beneficiar a sus personeros, mientras gran parte de nuestros médicos y enfermeras que están dándolo todo en los hospitales denuncian que no han sido vacunados.
Nuestro llamado es claro y firme: dejen entrar las vacunas que ya están disponibles con el mecanismo Covax y respeten los protocolos establecidos por la OMS. Recientemente arribaron a Argentina 200 mil dosis de la vacuna AstraZeneca mediante Covax, mientras que aquí se niegan a recibirlas por motivos políticos, sin basamentos científicos.
Con información nota de prensa
